Ucrania: más de 28.602 kilómetros de tuberías en juego - por Francesc Sánchez

"28.602 kilómetros de tuberías atravesaban en el año 2003 el territorio de Ucrania. 20.069 correspondían a los gasoductos, 4.435 a los oleoductos, y los 4.098 kilómetros de tuberías restantes eran usadas para transportar productos refinados."

Una cuestión de fontaneros
Ucrania: más de 28.602 kilómetros de tuberías en juego
por Francesc Sánchez


28.602 kilómetros de tuberías atravesaban en el año 2003 el territorio de Ucrania. 20.069 correspondían a los gasoductos, 4.435 a los oleoductos, y los 4.098 kilómetros de tuberías restantes eran usadas para transportar productos refinados.

El principal trazado de tuberías forma parte de una estructura soviética, procede de Rusia y llega hasta Rumania. Forma parte del muy importante entramado de oleoductos y gasoductos soviético, encargado de transportar el petróleo y el gas procedente del Mar Caspio, los Urales, y –si es menester- desde la lejana Siberia. Este entramado en Ucrania tiene cuatro importantes enclaves: Lisichansk, Kremetchoug, Kherson y Odessa. Estos enclaves son refinerías, encargadas, bien de succionar crudo y gas para uso de la propia región, bien para incrementar el caudal del entramado hacia Europa Occidental. El destino final del entramado hoy es Rumania.



Este trazado atraviesa la Ucrania del sudeste, encontrándose muy cerca de su recorrido las ciudades de Karkof, Donetsk, y las ya mencionadas antes por sus refinerías.

En el 2001 y el 2002, Ucrania disponía de unas reservas probadas de 197.5 millones de barriles de petróleo, y de 560.7 billones de m3 de gas natural.

La producción de petróleo en ese mismo año era de 86.490 barriles diarios, en cambio el consumo interno se elevaba a los 290.000 barriles diarios. Por esta cifra podemos apreciar como la producción diaria de barriles de petróleo en el 2001-pese a la disposición de importantes reservas- no fue capaz de suplir el gasto energético nacional.

Con el gas natural pasa lo mismo. Si bien el gasto anual ascendió a 74.1 billones de m3, la producción tan sólo fue de 18.2 billones de m3, teniendo que importarse 55.9 billones de m3.

Parece evidente que si bien en el gas natural más o menos cuadran las cifras con las importaciones, no sucede lo mismo con el petróleo. El gasto energético es cubierto como el del gas con las importaciones por ese entramado de tuberías pero permanece detras de una barrera de niebla.

Ucrania dispone de reservas más que suficientes para abastecer su propia demanda interna energética, y pronto será capaz de exportar a buen ritmo esos recursos. El entramado de oleoductos y gasoductos se suman a suplir el actual déficit energético, y son también fundamentales para Europa Occidental y los Estados Unidos.

El petróleo y el gas procedente de Rusia, proviene asimismo de tres regiones fundamentales para el sostén energético mundial.

Las puertas de los hidrocarburos

La primera y más conocida, la región de Oriente Medio representada por Iraq, Irán y Siria (Arabia Saudi queda excluida de este grupo), tiene al menos tres vías de transporte. 1. A través de sus propios puertos en el Golfo Pérsico, 2. A través de los oleoductos propios y de terceros países hacia el Mediterráneo, 2. A través de las infraestructuras turcas que desenvocan en el Mar Negro, y conectan con el entramado del Cáucaso, y 3. A través de oleoductos y gasoductos propios y soviéticos atravesando la región del Cáucaso.


La otra región en importancia es la de las tierras que bordean el Mar Caspio, teniendo su principal enclave en la ciudad refinería de Baku. Alrededor del Caspio, tenemos los pozos kazajos de Tenguiz, Karazhanbas y Donga, los pozos de Turkmenistán, y los propios pozos gestionados por los azebadjanos de Baku. Aparecen en acción los oleoductos soviéticos, iraníes, y turcos en la región del Cáucaso. La interconexión con los oleoductos de la región de Oriente Medio tiende a ser total.

Finalmente la ultima región es la propiamente rusa, en la que desde la lejana Siberia a la cordillera de los Urales, dispone de un trazado de tuberías en continua ampliación.

Técnicamente es posible la interconexión total con Europa Occidental de estas ricas regiones en recursos energéticos mediante oleoductos y gasoductos. Las infraestructuras anteriormente mencionadas, pese a su nacionalidad, cada vez están más presionadas –cuando no siendo usadas- por petroleras europeas y extranjeras.

La estela roja –y no ideológica precisamente- que han dejado ya estas infraestructuras son la implosión de las guerras étnicas y nacionales durante el periodo final de descomposición de la Unión Soviética, en las regiones de Armenia, Georgia, Azerbadjan, las Osetias, la primera y segunda chechen en Cechenia e Ingusetia, y las continuas desestabilizaciones en Bielorrusa y hoy en Ucrania. El ultimo episodio en Osetia del Norte se suma pues a este trazado de tuberías oculto lleno de fricciones y disputas.

Volviendo a Ucrania, una pieza maestra de este rompecabezas. Se ha de observar que la posible secesión del sudeste del país –proclive por lazos tanto históricos como culturales hacia Rusia- no sería nada satisfactoria para el resto del país, al encontrarse en esas regiones la verdadera riqueza nacional: sus tuberías.

Las implicaciones internacionales de esa posible secesión serian importantes si por alguna razón las tuberías volaran por los aires.

Viktor YushchenkoYanukovich el 26 de diciembre será, con el beneplácito de los Estados Unidos, Rusia y la Unión Europea, el primer presidente bicéfalo de la historia de Ucrania

Francesc Sánchez – Marlowe
Redactor, El Inconformista Digital.

Incorporación – Redacción. Barcelona, 8 Diciembre 2004.

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