Catalanofobia - por Francesc Sánchez
"El pasado fin de semana hubo en Barcelona una manifestación bajo el lema “Som una nació. Tenim dret a decidir” que movilizó no menos de medio millón de personas llegadas de infinidad de ciudades y pueblos tanto catalanas como de otros territorios."
Nuevas hazañas nacionales
Catalanofobia
por Francesc Sánchez
Según el RAE el termino fobia, que procede del termino griego φοβíα, tiene dos acepciones, la primera la define como “aversión obsesiva a alguien o algo” y la segunda se refiere a un “temor irracional compulsivo”.
Creo que el termino fobia es lo que mejor define el comportamiento de muchos cuadros políticos del Partido Popular, más de los esperados del PSOE, y lamentablemente muchos ciudadanos españoles. Si para estos últimos la ignorancia que procede del desconocimiento y de un malintencionado imaginario colectivo pudiera suponer una explicación, me parece que para lo que respecta a la clase política mencionada no hay ningún tipo de disculpa posible.
Los apoyos políticos de los partidos catalanes al gobierno central y el sobado y cansino tramite del nuevo Estatuto, en lugar de estrechar lazos y ser interpretados como un firme compromiso de los catalanes por el interés general de España, han sido percibidos por los castellanos con una aversión obsesiva y un temor irracional compulsivo hacia todo lo que hiciera ligeramente referencia a lo catalán. Desprendiéndose de ello que lo catalán si bien puede existir, no se ha de notar y en ningún momento ha de superar en España a lo castellano.
De esta forma tenemos que el PSOE, movido por los sentimientos contrapuestos que tiene dentro de sus filas y su incapacidad –o quizá deberíamos decir cobardía– de hacer pedagogía deja en la estacada a los ruidosos de la Esquerra, para acercarse a los hipócritas y vendepatrias de Convergencia. Sin inmutarse en que tal comportamiento fuerza tensiones en el gobierno tripartito de la Generalitat y debilita a su propio partido, por ser el PSC quien ostenta la presidencia.
No obstante quien ha roto definitivamente la baraja electoral en Cataluña ha sido el Partido Popular. La actitud de odio hacia todo lo que provenga de Cataluña que se ha destilado en los últimos meses desde ese partido y sus extensiones sociales y mediáticas, han dejado en muy mal lugar a la franquicia que dignamente ha intentado defender Josep Piquer en estas tierras donde se hunden barrios enteros y aflora la cleptocracia. El ultimo cohete de fobia que ha afectado a una operación económica de suma importancia, no han dudado en lanzarlo a sabiendas que suponía quemar sus propia naves y dejar en la estacada al pueblo que dicen defender. No veo pues de que otra forma puede definirse el estar de acuerdo –y previsiblemente hacer posible– la venta a los alemanes de la gran eléctrica española, antes de que caiga en las manos de esos catalanes; nada menos que a los alemanes del estado libre de Baviera.
El pasado fin de semana hubo en Barcelona una manifestación bajo el lema “Som una nació. Tenim dret a decidir” que movilizó no menos de medio millón de personas * llegadas de infinidad de ciudades y pueblos tanto catalanes como de otros territorios. El trato informativo en los medios nacionales fue escaso y penoso, insultante al lado del bombo y platillo que le dieron al ultimo –y tan oportuno– comunicado de la banda armada ETA.
Luego todos juntos se preguntaran el por qué del enfado de muchos catalanes con el nuevo Estatuto, con la clase política en general, y el Partido Popular en particular. El por qué la nación no es solo como se pretende un sentimiento privado o de tribu, si no un símbolo de civilización desarrollada que se resiste a unos acuerdos tardo-franquistas y a unos arquetipos desfasados.
* Las cifras de los organizadores hablan de un millón de personas mientras que las de la policía urbana sentencian que no fueron más de cien mil.
Francesc Sánchez - Marlowe. Barcelona.
Redactor, El Inconformista Digital.
Incorporación - Redacción. Barcelona, 23 Febrero 2006.
Artículos nexo relacionados: - La financiación pública española en entredicho - Propuesta de nuevo Estatuto en Cataluña - El Congreso debate el Estatuto Catalán
Nuevas hazañas nacionales
Catalanofobia
por Francesc Sánchez
Según el RAE el termino fobia, que procede del termino griego φοβíα, tiene dos acepciones, la primera la define como “aversión obsesiva a alguien o algo” y la segunda se refiere a un “temor irracional compulsivo”.
Creo que el termino fobia es lo que mejor define el comportamiento de muchos cuadros políticos del Partido Popular, más de los esperados del PSOE, y lamentablemente muchos ciudadanos españoles. Si para estos últimos la ignorancia que procede del desconocimiento y de un malintencionado imaginario colectivo pudiera suponer una explicación, me parece que para lo que respecta a la clase política mencionada no hay ningún tipo de disculpa posible.
Los apoyos políticos de los partidos catalanes al gobierno central y el sobado y cansino tramite del nuevo Estatuto, en lugar de estrechar lazos y ser interpretados como un firme compromiso de los catalanes por el interés general de España, han sido percibidos por los castellanos con una aversión obsesiva y un temor irracional compulsivo hacia todo lo que hiciera ligeramente referencia a lo catalán. Desprendiéndose de ello que lo catalán si bien puede existir, no se ha de notar y en ningún momento ha de superar en España a lo castellano.
De esta forma tenemos que el PSOE, movido por los sentimientos contrapuestos que tiene dentro de sus filas y su incapacidad –o quizá deberíamos decir cobardía– de hacer pedagogía deja en la estacada a los ruidosos de la Esquerra, para acercarse a los hipócritas y vendepatrias de Convergencia. Sin inmutarse en que tal comportamiento fuerza tensiones en el gobierno tripartito de la Generalitat y debilita a su propio partido, por ser el PSC quien ostenta la presidencia.
No obstante quien ha roto definitivamente la baraja electoral en Cataluña ha sido el Partido Popular. La actitud de odio hacia todo lo que provenga de Cataluña que se ha destilado en los últimos meses desde ese partido y sus extensiones sociales y mediáticas, han dejado en muy mal lugar a la franquicia que dignamente ha intentado defender Josep Piquer en estas tierras donde se hunden barrios enteros y aflora la cleptocracia. El ultimo cohete de fobia que ha afectado a una operación económica de suma importancia, no han dudado en lanzarlo a sabiendas que suponía quemar sus propia naves y dejar en la estacada al pueblo que dicen defender. No veo pues de que otra forma puede definirse el estar de acuerdo –y previsiblemente hacer posible– la venta a los alemanes de la gran eléctrica española, antes de que caiga en las manos de esos catalanes; nada menos que a los alemanes del estado libre de Baviera.
El pasado fin de semana hubo en Barcelona una manifestación bajo el lema “Som una nació. Tenim dret a decidir” que movilizó no menos de medio millón de personas * llegadas de infinidad de ciudades y pueblos tanto catalanes como de otros territorios. El trato informativo en los medios nacionales fue escaso y penoso, insultante al lado del bombo y platillo que le dieron al ultimo –y tan oportuno– comunicado de la banda armada ETA.
Luego todos juntos se preguntaran el por qué del enfado de muchos catalanes con el nuevo Estatuto, con la clase política en general, y el Partido Popular en particular. El por qué la nación no es solo como se pretende un sentimiento privado o de tribu, si no un símbolo de civilización desarrollada que se resiste a unos acuerdos tardo-franquistas y a unos arquetipos desfasados.
* Las cifras de los organizadores hablan de un millón de personas mientras que las de la policía urbana sentencian que no fueron más de cien mil.
Francesc Sánchez - Marlowe. Barcelona.
Redactor, El Inconformista Digital.
Incorporación - Redacción. Barcelona, 23 Febrero 2006.
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