Silban las balas - por Francesc Sánchez
Silban las balas
Francesc Sánchez
La jornada de ayer fue la más sangrienta desde el inicio de las protestas hace ya tres meses. En un solo día habrían muerto 35 personas, 75 desde que la revuelta y su brutal represión dieron un giro marcadamente violento. Los heridos y detenidos se cuentan por centenares. Ya no solo se trata del choque entre unos radicales armados con palos y una policía que utiliza material antidisturbios, ahora han pasado a usar tanto unos como otros fusiles y pistolas. Han aparecido también los primeros francotiradores que desde las alturas de los edificios matan a activistas y policías. Entre 60 y 70 policías están retenidos por los radicales. Mientras el alcalde de Kiev, Vladímir Makeenko, ha dimitido se dice que han empezado las tensiones dentro del Partido de las Regiones. La violencia se ha extendido a otras localidades del oeste de Ucrania.
El presidente Víctor Yanukóvich se habría reunido con los líderes de la oposición pero no habrían llegado a ningún acuerdo más allá de una tregua que ya nadie respeta. Se ha dicho también que el presidente podría convocar elecciones anticipadas. Pero realmente se sabe bien poco de lo que está sucediendo en las altas esferas ucranianas. Mientras una comisión de ministros de Exteriores de la Unión Europea (Laurent Fabius de Francia, Radoslaw Sikorski, de Polonia, y Frank-Walter Steinmeyer de Alemania) se ha reunido con el presidente ucraniano sin que haya trascendido nada de este encuentro, el presidente de la Comisión Europea, Durao Barroso, amenazaba a Ucrania con sanciones económicas y hacía efectivo el embargo de armamento. Estados Unidos ha exigido a Víctor Yanukóvich que retire su policía de las calles y ha pedido que el ejército no intervenga. Al hilo de esto último el presidente destituyó al Jefe del Estado Mayor por haber declarado que nunca ordenaría la intervención del ejército. En cuanto a la Rusia de Vladimir Putin, mantiene su ayuda económica: ha comprado obligaciones ucranianas por valor de 3.000 millones.
Muchos en Europa han loado las virtudes de la lucha que mantiene la oposición contra Yanukóvich, viendo en el deseo de parte de los ucranianos de querer entrar en la Unión Europea, una causa noble y un nuevo sentido para una Unión Europea falta de ideales y criticada desde la izquierda por su política económica, yo sin más me pregunto que tipo de valores queremos tener en Europa cuando se presiona a un gobierno elegido democráticamente y se ensalza a los ucranianos a rebelarse para que luego como hemos visto se empiecen a matar por las calles de Kiev. Esta evolución del conflicto en el que parte de los activistas se han pasado a la lucha armada y que el gobierno encuadra en una lucha contra el terrorismo se aleja de la protesta ciudadana y se acerca hacia la confrontación civil. La Unión Europea si quiere seguir manteniendo el poco crédito que le queda en esta crisis debe de ejercer de mediadora entre los dos bandos al lado de Rusia y los Estados Unidos. No podemos permitir una nueva guerra en el continente europeo.
Redacción. Internacional. El Inconformista Digital.
Incorporación - Redacción. Barcelona, 2 Diciembre 2013 / 21 Febrero 2014.
Francesc Sánchez
La jornada de ayer fue la más sangrienta desde el inicio de las protestas hace ya tres meses. En un solo día habrían muerto 35 personas, 75 desde que la revuelta y su brutal represión dieron un giro marcadamente violento. Los heridos y detenidos se cuentan por centenares. Ya no solo se trata del choque entre unos radicales armados con palos y una policía que utiliza material antidisturbios, ahora han pasado a usar tanto unos como otros fusiles y pistolas. Han aparecido también los primeros francotiradores que desde las alturas de los edificios matan a activistas y policías. Entre 60 y 70 policías están retenidos por los radicales. Mientras el alcalde de Kiev, Vladímir Makeenko, ha dimitido se dice que han empezado las tensiones dentro del Partido de las Regiones. La violencia se ha extendido a otras localidades del oeste de Ucrania.
El presidente Víctor Yanukóvich se habría reunido con los líderes de la oposición pero no habrían llegado a ningún acuerdo más allá de una tregua que ya nadie respeta. Se ha dicho también que el presidente podría convocar elecciones anticipadas. Pero realmente se sabe bien poco de lo que está sucediendo en las altas esferas ucranianas. Mientras una comisión de ministros de Exteriores de la Unión Europea (Laurent Fabius de Francia, Radoslaw Sikorski, de Polonia, y Frank-Walter Steinmeyer de Alemania) se ha reunido con el presidente ucraniano sin que haya trascendido nada de este encuentro, el presidente de la Comisión Europea, Durao Barroso, amenazaba a Ucrania con sanciones económicas y hacía efectivo el embargo de armamento. Estados Unidos ha exigido a Víctor Yanukóvich que retire su policía de las calles y ha pedido que el ejército no intervenga. Al hilo de esto último el presidente destituyó al Jefe del Estado Mayor por haber declarado que nunca ordenaría la intervención del ejército. En cuanto a la Rusia de Vladimir Putin, mantiene su ayuda económica: ha comprado obligaciones ucranianas por valor de 3.000 millones.
Muchos en Europa han loado las virtudes de la lucha que mantiene la oposición contra Yanukóvich, viendo en el deseo de parte de los ucranianos de querer entrar en la Unión Europea, una causa noble y un nuevo sentido para una Unión Europea falta de ideales y criticada desde la izquierda por su política económica, yo sin más me pregunto que tipo de valores queremos tener en Europa cuando se presiona a un gobierno elegido democráticamente y se ensalza a los ucranianos a rebelarse para que luego como hemos visto se empiecen a matar por las calles de Kiev. Esta evolución del conflicto en el que parte de los activistas se han pasado a la lucha armada y que el gobierno encuadra en una lucha contra el terrorismo se aleja de la protesta ciudadana y se acerca hacia la confrontación civil. La Unión Europea si quiere seguir manteniendo el poco crédito que le queda en esta crisis debe de ejercer de mediadora entre los dos bandos al lado de Rusia y los Estados Unidos. No podemos permitir una nueva guerra en el continente europeo.
Redacción. Internacional. El Inconformista Digital.
Incorporación - Redacción. Barcelona, 2 Diciembre 2013 / 21 Febrero 2014.