Vuelta al Halloween - por Francesc Sánchez


 De unos años aquí, quizá por influjo de la mercadotecnia del cine norteamericano y los medios de comunicación, por estos territorios se ha ido integrando en nuestras sociedades cierta forma de vida llegada del otro lado del Atlántico. Incluidas en estas contribuciones culturales, han llegado también costumbres y ritos que en fechas señaladas, como el día de los difuntos, han logrado introducirse y desarrollarse en nuestras sociedades con plena naturalidad. Es fácil ver pues en nuestras ciudades hispánicas en estas señaladas fechas, fiestas en donde los jóvenes se divierten ― como en los carnavales de febrero― vistiendo disfraces, o también en numerosos bares las famosas calabazas huecas, con las debidas perforaciones en forma de cara, y una vela en su interior. Y sobre todo nuevamente, el cine, que en los pases por televisión, normalmente por estas fechas nos solian ofrecer filmes de terror.

Sin embargo, lejos de estas importaciones de la mercadotecnia norteamericana disfrazadas de folclore, el sentido originario del Halloween aunque lo intuimos, no se desarrolla plenamente, porque mayormente nos es desconocido.

El Halloween ―todos los santos en inglés― que nos viene ahora en la forma que hemos descrito, en Estados Unidos tiene un sentido sobre todo para los niños. En la víspera de la fecha señalada los niños tienen por unas horas la oportunidad de cambiar su relación con sus mayores. Disfrazados y armando jaleo van, caída ya la noche, por las calles llamando a la puerta de los vecinos para exigir un regalo, o exponerlos en su negativa a una broma. Esta inversión de su papel con respecto a los mayores, les permite incluso ser malos. Por una vez al año los débiles ―los niños― tienen la oportunidad de convertirse en poderosos ante los mayores, por encima de las convenciones sociales. La inversión de dos oposiciones importantes en la vida norteamericana como son, el equilibrio de poder adulto-niño y la expectativas sobre el bien y el mal, convierten al Halloween en un ritual de rebelión.

Si hasta aquí hemos podido ver que parte del significado y desarrollo del Halloween norteamericano no ha llegado a nuestro país, quizá nos sorprenderá saber que estas celebraciones son una reminiscencia de unas fiestas paganas celtas, conocidas como Samhain.

El Samhain en el año céltico marcaba el inicio de la estación del invierno, que se correspondía con la obscuridad. Según la leyenda todo en la naturaleza parecía detenerse para dar paso a un nuevo momento en el ciclo vital, en donde la vida crecía internamente. Los pueblos del norte esperaban la llegada de los familiares difuntos para despedirse de ellos, y para iluminarles el camino encendían hogueras en las aldeas, y ofrecían ofrendas a los dioses que permitían esta vuelta temporal de los fallecidos. El Samhain, como la celebración del solsticio de verano, también ésta íntimamente relacionada con la fiesta de la cosecha ―que se corresponde con el equinocio de Otoño, el 21 de Septiembre―.

Cuando el imperio romano conquistó las Galias, integró las celebraciones de la fiesta de la cosecha en sus creencias, pasando a honrar a Pomona ―diosa de los frutales―. Finalmente con la concepción del cristianismo y la caída del imperio, Roma perfiló lejos de su significado original, lo que devendría con el paso de los tiempos en la fiesta de los difuntos, o todos los santos.

La conquista y posterior independencia de Norteamérica en el siglo XVIII, nutrida de importantes migraciones europeas y lejos del poder eclesiástico de Roma, desarrollaría con el paso de los tiempos el conocido Halloween, que si bien no es más que una reminiscencia del Samhain, guarda ciertos aspectos más directos que el todo los santos cristiano. Muchos años después, por la mercadotecnia que impulsan las naciones más potentes en la globalización, hoy nos han exportado algo parecido al Halloween a España. Pero a pesar de la perdida del significado original, lejos de verlo como algo ajeno y extranjero, quizá deberíamos de verlo como un reencuentro desnaturalizado con parte de nuestros orígenes más antiguos.

Francesc Sánchez - Marlowe. Barcelona.
Redactor, El Inconformista Digital.

Incorporación - Redacción. Barcelona, 1 Noviembre 2005.

Publicado de nuevo el 31 de Octubre de 2016.