31E: La Marcha del Cambio - por Francesc Sánchez

Madrid se llenó de gente el pasado sábado 31 de enero bajo la expresión 'La Marcha del Cambio'. El recorrido fue desde la Plaza de Cibeles a la Puerta del Sol. La asistencia fue multitudinaria (entre 100.000 y 300.000 personas llegadas de todo el país). Los incidentes ninguno. Y la convocatoria: la joven formación política Podemos que en un año de existencia sale en los primeros puestos de las encuestas de intención de voto, y quiere cambiarlo todo.

En esta fiesta de la ilusión en la que en el mitin final participaron Luis Alegre, Íñigo Errejón, Carolina Bescansa, y Pablo Iglesias, se mostraron herederos del movimiento ciudadano del 15M, y se aludió a la victoria de Syriza en Grecia para demostrar que se puede tomar democráticamente el poder. - seguir leyendo

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El discurso de Podemos viene dado por la crisis económica y las dificultades que tienen la mayoría de españoles para sobrevivir día a día. El último gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, después de quemar su último cartucho en un plan de inversiones públicas, pidió un rescate financiero de 100.000 millones de euros a la Unión Europea para salvar a la banca española en dificultades (principalmente algunas Cajas de Ahorro). La contrapartida fue un requerimiento de esta misma Unión Europea (liderada por Angela Merkel) para que el gobierno español aplicara una política de austeridad que redujera el déficit del estado: esto se tradujo en la inclusión del artículo 135 en la Constitución que limita este mismo déficit, y en los primeros recortes sociales (reducción del sueldo de los funcionarios, congelación de pensiones, la cuasi paralización de la Ley de la Dependencia, y la eliminación del cheque bebe). Se subió también el IVA y se inició un proceso de privatización y concentración de las Cajas de Ahorro: éstas, mientras estafaban a los jubilados con las participaciones preferentes, se transformaron en bancos.

Los socialistas perdieron estrepitosamente las elecciones pero los españoles le dieron la mayoría absoluta a la derecha del Partido Popular que incumplió punto por punto su programa electoral. Bajo el gobierno de Mariano Rajoy se ha continuado con la política de austeridad marcada desde Bruselas con nuevos recortes sociales (los más lesivos en Sanidad y Educación), ha eclosionado una corrupción generalizada, que en tiempos de crisis económica siempre son más lacerantes, y se ha procedido -esta vez sí- a nacionalizar parte de la banca: naturalmente la que entró en bancarrota, entre ellas Bankia, que se creó bajo la matriz de Caja de Madrid absorbiendo a otras cajas menores (Bancaja, La Caja de Canarias, Caja Ávila, Caixa Laietana, Caja Segovia y Caja Rioja), y Catalunya Banc, bajo la matriz de Catalunya Caixa y otras cajas menores (Caixa Tarragona y Caixa Manresa), después comprada por el BBVA.

Mariano Rajoy asegura que España ha salido de la crisis económica. Las grandes cifras macroeconómicas así parecen indicarlo: el Producto Interior Bruto crece y la prima de riesgo (el baremo que usado para calcular el interés de la deuda externa) baja. Sin embargo el Banco de España desde hace años no ha hecho más que aumentar sin parar la emisión de deuda para que el gobierno pueda hacer frente a los pagos corrientes. Los cinco millones de parados declarados (los apuntados al Servicio Público de Empleo Estatal y sus homónimos autonómicos) forman también parte de estas grandes cifras aunque no sean publicitadas como un éxito del gobierno. El desempleo provoca pobreza extrema a millones de familias, que en muchos casos son desahuciadas de sus viviendas por no poder hacer frente a sus hipotecas, y tienen que acudir a comedores sociales o a la dispensación de comida que llevan a cabo las organizaciones de caridad. Decenas de miles de jóvenes, muchos preparados académicamente, han decido abandonar el país para encontrar un trabajo en el norte, como en el pasado hicieron sus padres, muchas veces encontrando todo tipo de dificultades.

Este es el panorama español que Podemos ha sabido interpretar y que pretende cambiar. Sin embargo esta formación política tras hacer un análisis similar al descrito en este texto debe todavía explicitar su programa político. Podemos solo se ha batido una vez en unas elecciones, en las europeas del 2014, donde obtuvo cinco diputados. Sin embargo las encuestas (hasta la del CIS, la más gubernamental) le sitúan en segundo lugar en la estimación del voto, después del Partido Popular, y seguido del PSOE. En intención de voto ocupan la primera posición. Este año la primera convocatoria son las elecciones autonómicas de Andalucía, la segunda las municipales y autonómicas (donde en algunas ciudades se presentará en plataformas formadas con otras formaciones políticas), la tercera las autonómicas en Cataluña (donde Podemos inquieta a los partidos partidarios de la independencia), y finalmente las generales, donde por primera vez puede que tres partidos a escasa distancia se repartan la mayoría de los votos.

Francesc Sánchez - Marlowe. Barcelona.
Redactor, El Inconformista Digital.

Incorporación - Redacción. Barcelona, 5 Febrero 2015.